Campesinos bolivianos arrecian la protesta contra el prefecto opositor
Prensa Latina
En su octavo día de protestas contra la gestión del prefecto opositor Mario Cossío, decenas de campesinos del departamento boliviano de Tarija bloquearon hoy más de 30 tramos carreteros.
El cerco en demanda de mayor aporte presupuestario a proyectos locales comenzó en Valle Alto, provincia Cercado, cuya capital es la ciudad de Tarija ( 860 kilómetros al sur de La Paz), pero se extendió este lunes a la localidad de Bermejo y también a la provincia Gran Chaco.
La administración de Cossío planteó su renuencia a dialogar bajo medidas de presión, al tiempo que pidió colaboración el Ejecutivo.
Mientras no se levante el bloqueo de rutas no vamos a dialogar, remarcó el secretario general de la Prefectura, Mauricio Lea Plaza.
Al respecto, el líder de los labriegos tarijeños, Luis Alfaro, aseveró que continuarán con la manifestación hasta lograr sus objetivos.
Por su parte, la ministra de Desarrollo Rural y Tierras, Julia Ramos, desmintió versiones periodísticas que pretenden involucrarla en las protestas en Tarija.
Ramos aseguró que el conflicto es netamente interno, por lo que pidió a la máxima autoridad departamental atender las exigencias de los originarios.
A su turno, la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB) no descartó reforzar la medida de presión popular.
De acuerdo con Isaac Avalos, máximo líder de la CSUTCB, la decisión podría consolidarse en los próximos días si Cossío persiste en despojar a los municipios rurales unos 82 millones de bolivianos (casi 12 millones de dólares) del Proyecto Productivo Solidario (PROSOL).
"Los bloqueos son para hacer respetar y que devuelven esos recursos a nuestros hermanos", remarcó.
Avalos explicó que con esos fondos provenientes de los impuestos a los hidrocarburos, los campesinos podían comprar equipos necesarios para cultivar la tierra, de ahí el impacto de la arbitraria medida.
También acusó a Cossío de querer emplear esos recursos con fines proselitistas de cara a las elecciones del 6 de diciembre próximo.
Asimismo recordó los procesos judiciales que se siguen contra Cossío, acusado de corrupción y malversación de los bienes del Estado.
El cerco en demanda de mayor aporte presupuestario a proyectos locales comenzó en Valle Alto, provincia Cercado, cuya capital es la ciudad de Tarija ( 860 kilómetros al sur de La Paz), pero se extendió este lunes a la localidad de Bermejo y también a la provincia Gran Chaco.
La administración de Cossío planteó su renuencia a dialogar bajo medidas de presión, al tiempo que pidió colaboración el Ejecutivo.
Mientras no se levante el bloqueo de rutas no vamos a dialogar, remarcó el secretario general de la Prefectura, Mauricio Lea Plaza.
Al respecto, el líder de los labriegos tarijeños, Luis Alfaro, aseveró que continuarán con la manifestación hasta lograr sus objetivos.
Por su parte, la ministra de Desarrollo Rural y Tierras, Julia Ramos, desmintió versiones periodísticas que pretenden involucrarla en las protestas en Tarija.
Ramos aseguró que el conflicto es netamente interno, por lo que pidió a la máxima autoridad departamental atender las exigencias de los originarios.
A su turno, la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB) no descartó reforzar la medida de presión popular.
De acuerdo con Isaac Avalos, máximo líder de la CSUTCB, la decisión podría consolidarse en los próximos días si Cossío persiste en despojar a los municipios rurales unos 82 millones de bolivianos (casi 12 millones de dólares) del Proyecto Productivo Solidario (PROSOL).
"Los bloqueos son para hacer respetar y que devuelven esos recursos a nuestros hermanos", remarcó.
Avalos explicó que con esos fondos provenientes de los impuestos a los hidrocarburos, los campesinos podían comprar equipos necesarios para cultivar la tierra, de ahí el impacto de la arbitraria medida.
También acusó a Cossío de querer emplear esos recursos con fines proselitistas de cara a las elecciones del 6 de diciembre próximo.
Asimismo recordó los procesos judiciales que se siguen contra Cossío, acusado de corrupción y malversación de los bienes del Estado.