LA PRESIDENTA DE LA OMS ADVIRTIO QUE LA GRIPE A PUEDE VOLVER CON “UNA VIRULENCIA SIN PRECEDENTES”
“Nadie puede predecir qué va a pasar con el virus”
.El virus de la influenza puede desaparecer o llegar “con una venganza” en una posible segunda ola
Así lo destacó Margaret Chan para responder a la acusación de que la OMS “sobrerreaccionó” ante la epidemia.
El virus de la gripe A puede volver “con una venganza” en los próximos meses, afirmó la directora general de la OMS, Margaret Chan, en respuesta a la acusación de que la entidad “sobrerreaccionó” ante la epidemia. Además, “nadie puede predecir qué va pasar cuando la gripe A llegue al Hemisferio Sur, y seguramente va a llegar”, advirtió la funcionaria de la OMS, mientras la cifra mundial de afectados sobrepasaba los mil casos. Sucede que el nuevo virus se presentó, por así decirlo, a contraturno: apareció en el Hemisferio Norte cuando la temporada anual de las gripes está finalizando. Es probable que se desarrolle más plenamente en el sur, en los próximos meses, para después volver al norte. Si nadie puede decir qué va a pasar es porque todos los virus de la gripe, y también éste, mutan permanentemente, de modo tal que no se puede prever su comportamiento futuro. Hoy por hoy, la titular de la OMS observa que “el virus está siendo leve en la mayoría de los países”. Sin embargo, la minoría donde no fue leve es nada menos que México, que registra la mayor tasa de infecciones y de muertes. Hay que anotar que la mayoría “leve” corresponde en general a países desarrollados, y la diferencia con México u otros países latinoamericanos podría residir en la calidad de los respectivos sistemas de salud. Aunque poco pueda saberse sobre el comportamiento futuro del virus, para la titular de la OMS es preferible estar preparados para la hipótesis peor: “Una segunda ola puede atacar con una virulencia sin precedentes”, advirtió.
Según informó la OMS, “21 países han reportado 1085 casos de influenza A (H1N1)”. El país más afectado es desde luego México, con “590 casos confirmados en laboratorio, incluyendo 25 muertes –precisó la OMS–. Estados Unidos reportó 286 casos confirmados, incluyendo una muerte”. Sigue Canadá, con 101 confirmados y ninguna muerte. Estos tres países son los únicos en los que se verificó trasmisión de humano a humano en la comunidad. En los demás países, hasta ahora los casos registrados se trasmitieron en círculos vinculados con viajeros procedentes de México. En España se registran 54 casos; en Gran Bretaña, 18; en Alemania, ocho; en Nueva Zelanda, seis; en Francia, cuatro; en Israel, cuatro; en Italia y en El Salvador, dos; en Hong Kong, Dinamarca, Irlanda, Holanda, Portugal, Corea del Sur, Suiza, Costa Rica y Colombia, uno. En caso de que se verifique, en algún país fuera de la región de las Américas, la difusión del virus en la comunidad, la OMS declarará la “fase pandémica”, máximo nivel de alerta; actualmente rige la fase 5, “inminencia de pandemia”.
De todos modos, según puntualizó Chan, “la fase 6 no quiere decir que todos los países se afectarán a la vez ni que todas las personas enfermarán; el estado pandémico es una señal a las autoridades sanitarias del mundo para que inicien determinadas acciones, no es el fin del mundo”. Lo cierto es que “no sabemos de cuánto tiempo disponemos antes de pasar a la fase 6”, agregó.
Informaciones desde México sugerían que el impacto de la epidemia podría ser menor que el estimado, y el ministro de Salud de ese país, Angel Córdova, había afirmado que “la evolución de la epidemia está en su fase de descenso”. La doctora Chan advirtió que la declinación en las tasas de mortalidad, dentro y fuera de México, no significan que la epidemia se detenga. “No estoy prediciendo que la pandemia va a estallar, pero es mejor estar sobrepreparado que no estar preparado”, subrayó, y citó el caso de la epidemia de 1918, que, luego de una aparición inicial moderada, atacó en una segunda ola letal. “Esperamos que el virus desaparezca, pero si no sucede así vamos directamente a una epidemia de envergadura”, destacó.
“En los países del Hemisferio Sur se aproxima el invierno, la estación en que se producen picos de gripe estacional. Tenemos que ser muy cuidadosos –requirió Margaret Chan–. Nadie puede predecir qué va a pasar cuando los países del sur tengan picos de gripe y esta forma nueva llegue, y seguramente lo va a hacer.” La funcionaria admitió que “este virus está siendo leve en la mayoría de los países, pero estamos en una fase muy temprana y todavía no hemos visto todo el espectro de la nueva enfermedad. La epidemia de 1918 empezó también como una enfermedad leve, tuvo un período de calma en el que parecía haberse retirado pero volvió y causó millones de muertos. Por supuesto, hoy estamos mucho mejor preparados, pero los virus de la gripe son muy impredecibles, muy tramposos. No debemos confiarnos”.
En el mismo sentido, Richard Besser, director del Centro de Control de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), observó que “en pandemias anteriores ha habido olas sucesivas, y uno no sabe qué hará este virus”. Mientras tanto, “vemos infecciones en casi todos los estados norteamericanos”, observó. De todos modos, Besser encontró “signos alentadores”, como lo es que, en Estados Unidos, “la inmensa mayoría de los enfermos muestra síntomas leves” y que “en las pruebas de laboratorio se detectaron diferencias significativas con el virus letal de la ‘gripe española’”, que en 1918 mató a unos 40 millones de personas.
Incluso se sabe poco acerca del comportamiento actual del nuevo virus. Keiji Fukuda, director adjunto de la OMS, señaló que “los cuadros de diarrea parecen estar más asociados a él que a los virus gripales ya conocidos” y observó que “todavía no se conoce con precisión su período de incubación”. Chan señaló que “estamos viendo muchos adultos jóvenes infectados, cuando lo habitual es que la gripe infecte a mayores y a niños”.
Besser comentó que “la comunidad internacional trabaja en el seguimiento del virus cuando llegue al Hemisferio Sur, para ver si se vuelve más severo o no”, a fin de anticipar “cómo se va a comportar en la próxima temporada de gripe, en el otoño” (boreal).
En realidad, “la ‘segunda ola’ de la gripe A, que preocupa a los especialistas del Hemisferio Norte, puede ser la primera ola en nuestro Hemisferio Sur –observó Horacio López, profesor titular de Infectología en la Facultad de Medicina de la UBA–. Estamos entrando en la temporada en que los virus de la gripe se desarrollan más, en un clima más frío, con menos humedad y más concentración de personas en lugares cerrados”. El especialista argentino coincidió en que “con el virus de la influenza no se puede hacer futurología: aun la gripe estacional, que se presenta todos los años, no siempre tiene la misma severidad, sin que esto pueda preverse”. En cuanto al grado de virulencia actual, López precisó que “hasta ahora la tasa de mortalidad es de 4,2 en México y de 0,25 en el resto del mundo: la diferencia es enorme. Habría que investigar sus causas, pero desde ya los diarios mexicanos cuentan de casos con neumonías que tardaron días en ser llevados a los centros de salud; esas demoras suelen ser fatales”.
En cuanto al desarrollo de una vacuna, es encarado por organismos científicos estatales, tanto en Estados Unidos como en la Unión Europea, y también por investigadores de la OMS. Ayer Androulla Vassiliou, titular de Sanidad de la Comisión Europea, anunció que “se espera, para alrededor del 11 de mayo, estar en condiciones de dar a la industria farmacéutica los lineamientos para elaborar una vacuna”, que a su vez podría estar disponible en un lapso de “entre ocho y doce semanas”.
Anoche, Gran Bretaña anunció nueve casos nuevos de gripe A, lo cual eleva su total a 27: según el Ministerio de Salud de ese país, “dos de los casos procedían de México y siete se contagiaron en Gran Bretaña”: en caso de verificarse una difusión propia en ésa u otra comunidad, la OMS declarará la pandemia.